Carta de Derrota


Ver Travesia Atlantica 2014 en un mapa más grande

domingo, 3 de agosto de 2014

DOS MESES Y FINAL DEL BLOG


Justo hoy se cumplen los dos meses del accidente del Jafam en su viaje a Azores.  En estas semanas regresamos a Saint Martin, hicimos los trámites y preparamos el barco para una larga estancia en varadero, regresamos a casa, nos reencontramos con la familia.
Ha llegado el momento de poner una última entrada a este blog,  creado para contar nuestra aventura de cruzar el Atlántico al que llamamos "El Gran Salto" y que no acabará definitivamente hasta que sepamos qué pasa con el barco y la tripulación. Cuando haya nuevas noticias las daremos para nuestros seguidores y amigos pero hemos pensado que una buena manera de cerrar (temporalmente) el blog es una breve reflexión, a modo de resumen de lo que ha supuesto la aventura desde el día 1 de noviembre, momento en que el  Jafam inició su derrota hacia las Canarias

Cruzar el Atlántico en un velero de doce metros es un reto muy importante para cualquier tripulación, tanto desde el punto de vista físico,  mental y emocional, especialmente cuando la tripulación es sexagenaria.
La buena preparación del barco y del material es fundamental aunque no garantiza la ausencia de averías ni roturas, por lo que hay que estar preparado para cualquier eventualidad.
En nuestro caso, aparte de la pérdida del mástil, sufrimos otras averías en el sistema eléctrico con la generación de energía, en las comunicaciones y en el piloto automático. Pero la gran mayoría de los barcos que enlazaban a través de la Rueda de los Navegantes sufrieron también averías importantes, a pesar de ser veleros más modernos y de mayor eslora como el Bulcanier, un velero de 21 metros vencedor de la Sydney Howard que se fué a pique en mitad del Atlántico por una vía de agua El cruce es pues exigente con los que se atreven a cuestionar su superioridad y castiga los materiales.

La labor de Rafael del Castillo, con su Rueda de los Navegantes, hecha desde el voluntariado, suple las graves deficiencias de los organismos oficiales españoles en relación a quienes cruzamos el Atlántico. El valor de poder escuchar a las 23 UTC, todas las noches, una voz amiga con la previsión meteorológica para los próximos días y sus consejos ante cualquier adversidad, sólo está en condiciones de reconocerlo quien ha sido usuario de esta labor altruista. Si además, como fue nuestro
caso, sufres un grave accidente, saber que alguien te va a ayudar poniendo todo su esfuerzo para que recibas ayuda desde la distancia es impagable, como en el referido hundimiento del Bulcanier antes de que el barco se hundiese, hizo que un crucero desviase su ruta para recoger a los náufragos.

Los modelos de previsión meteorológica son aproximaciones a la realidad, según nuestra experiencia siempre infravaloradas: el viento real ha sido constantemente superior al previsto. Tampoco las situaciones sinópicas se cumplen con precisión: en nuestro cruce tuvimos mucho más viento y más chubascos de los previstos para la época que lo hicimos. Por tanto has de preparar el animo para que no te afecte anímicamente y preparar el barco para que no te sorprenda -si es posible- una ola traicionera que te ponga el barco por bao.
Navegar por el Caribe y las Pequeñas Antillas  es cualquier cosa menos fácil, especialmente los pasos


de los canales entre islas. En estos canales confluyen corrientes y mareas intensas con cambios de vientos producidos por la oro-grafía de las islas, volcánicas y con picos que superan los mil metros de altitud. Hicimos más de una docena de estos pasos y el de Dominica a Guadalupe fue especialmente complicado.

Las sensaciones y recuerdos que nos llevamos de todas las islas visitadas son personales y probablemente no coincidiríamos en todo. En las islas no europeas hay una fuerte presión sobre el turismo náutico por parte de la población local para obtener algunos dólares y ello hace antipáticas las operaciones de fondeo, aparte de otras picarescas de mayor calado como las que sufrimos en Sant Vincent y Canouan. No obstante, por citar algunos lugares visitados en que estamos de acuerdo que son espectaculares: The Pitons en Sta. Lucia, la isla Bequia en su conjunto, Blue Lagoon en Saint Vincent, los cayos de Grenadines, Deshaies en Guadalupe, Saint Pierre en Martinica.

La convivencia de la tripulación en un espacio tan reducido como un velero de 12 metros es un elemento fundamental que marca la diferencia entre el éxito y el fracaso. Las guardias, la comida, el aseo personal, el orden, la limpieza, la implicación en las maniobras, las reacciones ante el peligro, los descansos, etc…son situaciones de prueba constante, que en nuestro caso se resolvieron de manera satisfactoria, siempre bajo la autoridad y la responsabilidad del patrón. Probablemente la convivencia sea más difícil en tierra que en el mar, donde el trabajo y el peligro dan suficiente ocupación.
El accidente que nos ha impedido completar el viaje, primero hasta Azores y después hasta Barbate es evidente que nos ha afectado anímicamente, especialmente al Armador que es quien más tiempo llevaba preparando el viaje y más ilusión le había puesto en la aventura. No obstante, lo sucedido era una posibilidad que formaba parte de la misma y estamos contentos de no haber sufrido daños personales y de la reacción que toda la tripulación tuvo en los momentos más difíciles. La solidaridad de otros navegantes y la ayuda de Rafael del Castillo son otras experiencias positivas de la situación vivida. En los navegantes de altura se practica con gran eficacia la solidaridad y eso contrarresta la soledad en momentos de dificultad.
En resumen, el Gran Salto ha sido un reto importante que algunos hemos experimentado en la fase otoñal de nuestra vida pero que ha sido un sueño largamente perseguido. Hemos vivido, a lo largo de siete meses, situaciones y aventuras que siempre nos acompañarán. Nada de esto hubiera sido posible sin nuestra determinación, sin poder disponer del tiempo necesario para hacerlo y sin el apoyo de nuestras familias, que probablemente han sufrido lo que no nos cuentan. Seguro que hay otras aventuras náuticas más importantes, más complejas y más dignas de ser admiradas, pero el GRAN SALTO ha sido la nuestra y la hemos contado en este blog de la manera más fiel posible.

Y ahora???

martes, 24 de junio de 2014

UNA SEMANA EN SAINT MARTIN

Los dos primeros días en Saint Martin estuvimos fondeados en la bahía de Marigot, junto al Hispania, mientras resolvíamos los primeros trámites. 
Saint Martin es una isla curiosa, dividida entre una parte francesa y otra holandesa, ésta en cierto modo independiente; hay una importante diferencia en los precios y en la zona francesa es frecuente que te apliquen la equivalencia entre euro y dólar americano. En la parte sur hay una amplia laguna, con numerosas marinas (algunas de alto nivel) y para acceder a su interior  se deben cruzar unos puentes levadizos que sólo se abren tres veces al día… 
Tuvimos la suerte de localizar TOBY, un varadero en el que el JAFAM fue sacado a tierra, convenientemente trincado ya que se acerca la época de los huracanes. Sus responsables (Paula al frente) han sido muy amables y cada tarde, al acabar la jornada laboral, nos reuníamos en el “local social” a beber algunas cervezas…Conocimos a personas muy interesantes, varadas junto a sus barcos, cada uno con su historia personal. 
El lunes día 16 nos visitó desde Antigua el inspector del seguro, para valorar los daños y emitir su informe. Luego nos dedicamos a recoger el barco, donar todos los víveres que quedaban y que podían estropearse, desconectar las baterías, recoger la dingui, etc. La noche del martes hicimos una cena de despedida con Paco y Catalina del Hispania y Fernando (que tanto nos han ayudado) en el Jimbo’s, en la parte holandesa. Finalmente, con mucha nostalgia y un cierto nudo en la garganta al ver la última imagen del Jafam, JF y FV cogimos el vuelo de Corsair a París, vía Pointe à Pitre, en Guadalupe. 

















Y así queda por ahora la aventura que empezó el día 1 de noviembre de 2013 con la salida de Badalona…Aventura que hemos contado puntualmente en este blog y que agradecemos todas las visitas recibidas. Ahora sólo queda pendiente una entrada: una valoración global de todo el viaje que colgaremos en unos días…


lunes, 16 de junio de 2014

VIAJE HASTA SAINT MARTIN

Una vez recuperada la “normalidad” (sin daños personales y con la emisora de onda corta funcional) analizamos las diferentes opciones que se nos planteaban. A través del inReach y de Rafael del Castillo que estuvo en permanente contanto con nosotros pudimos tranquilizar a la familia. Se decidió intentar llegar hasta Saint Martin, por ser la isla más próxima de la C.E. (a unas 550 millas!) y con buenos servicios náuticos. La disponibilidad de gasoil era muy justa para llegar, por lo que decidimos ir a bajas revoluciones (no sobrepasar las 1500 rpm), lo que hacía que el barco no superara las 4 millas a la hora, menos si el mar estaba en contra.
Empleamos 136 horas en llegar a la bahía  Marigot, en la parte francesa de Saint Martin, en lo que fue un viaje duro y agotador. El motor del Jafam respondió a la perfección; fuimos rellenando el depósito con nuestros bidones adicionales, controlando el consumo, hasta el punto que a la llegada sólo disponíamos de unos 30 litros de gasoil sobrante.
Diversas personas fueron claves en estos días de angustia: Ana, en contacto con Salvamento Marítimo; Rafael del Castillo, con sus ánimos y consejos durante el siniestro y cada noche en la hora de la Rueda; Catalina y Paco del Hispania, velero español que estaban en Saint Martin, y se trasladó a la bahia de Marigot para estar mas cerca y dispuestos a venirnos a rescatar en caso de algún problema con el motor o falta de combustible. A ellos nuestro agradecimiento por el apoyo que nos prestaron y la seguridad que nos dieron. Tambien a aquellos otros que estando lejos se interesaron por nuestra situación como el Skipper, el Vagabundo, el Arquimedes, el Micoa...  y si alguno me olvido, le pido mis disculpas.



domingo, 15 de junio de 2014

GRAVE ACCIDENTE























El martes día 3 de junio de 2014, habíamos recorrido unas 600 millas, a un promedio de unas 100 diarias ya que el viento no solía superar los 15 nudos, excepto durante los chubascos, y el paso de un frente que duró unas 24 horas. Avanzábamos más lento de lo previsto, con la génova y la trinqueta atangonadas. Sobre las 11 del mediodía, con viento flojo (escala Beaufort) pero con un fuerte mar de leva (+2 metros), el barco se balanceaba fuertemente unos 30 o 40 grados por el efecto de la mar.

De repente, sobre las 11, notamos una fuerte explosión que rápidamente identificamos con  la rotura del obenque bajo de babor a la altura de la cruceta. Inmediatamente lanzamos un cabo por el palo y la cruceta trincándolo al winche y ejercer toda la fuerza de contención posible. Pero el balance a estribor hacia que el palo flechase por su punto mas debil induciendo a que pudiese saltar el palo de la fogonadura con riesgo de que en una de esas salidas pudiese perforar el casco con grave riesgo para la seguridad de la tripulación.
Inmediatamente lanzamos un “may day” de socorro y en contacto por radio con la Rueda de los Navegantes se decidió desarbolar el barco con la finalidad de que la caída del palo (de aproximadamente una tonelada) fuese controlada. La operación fue compleja con la consiguiente  angustia por parte de la tripulación. Finalmente el palo cayó hacia popa sobre el arco de radar, destrozando el mismo y parte del instrumental electrónico.
Una primera lista de daños materiales ocasionados:

Palo mayor con enrollador, cableado y luces de posición
Stay de génova con enrollador
Stay de trinqueta con enrollador
Vela mayor enrollada
Tangón de génova
Obenques, obenquillos y baby
Backstay con tensor
Antena de radar
Reflector de radar
Anemómetro
Antena VHF
Armadura del antirrociones
Arco de Radar en popa
Placa solar
Antena A.I.S
Soporte Duo Gen


Dos elementos fundamentales quedaren intactos: antena de la emisora de onda corta y motor. Por otro lado, la tripulación no sufrió ningún daño. En consecuencia, a pesar de haber experimentado lo que probablemente sea el peor accidente para un velero, tres circunstancias nos favorecieron: la hora, el viento y la distancia de retorno a un puerto seguro. De noche o con viento o a mayor distancia que la que era posible superar con el gasoil disponible, probablemente el rescate hubiera sido muy complejo.





SALIDA DE JOLLY HARBOUR (ANTIGUA)


Una vez completada la tripulación con la llegada de Quim, nos dedicamos a preparar al Jafam para su viaje hasta las Azores: provisiones, cambio de aceite, reparación de la trinqueta y del Duogen, agua, suministro de combustible, etc. Previendo encontrar calmas en el viaje a  las Azores, adquirimos cuatro bidones más hasta disponer de unos 400 litros de gasoil (esta decisión resultó vital, como veremos). La marina de Jolly Harbour está muy vacía: es final de temporada y tenemos la sensación de ser de los últimos que regresan a Europa antes de la época de los huracanes. Finalmente, soltamos amarras y anclamos en la bahía exterior para comer. Sobre las cuatro de la tarde del día 28 de mayo de 2014, pusimos rumbo norte para con un viento de través dejar horas más tarde a Barbuda por estribor y adentrarnos de nuevo en el Atlántico.

viernes, 23 de mayo de 2014

DE SAINT PIERRE (MARTINICA) A DESHAIES (GUADALUPE)

El jueves sobre las 9 de la mañana, después de un desayuno local, levamos anclas con la voluntad de llegar cuanto más lejos mejor. Así fue: hicimos un recorrido total de 85 millas, cruzando dos canales (el de Dominica y Guadalupe, este de noche) hasta fondear a les tres de la madrugada a la marina de Rivière Sens, al sur de la isla. También recorrimos toda la costa de sotavento de Dominica, sin visitar la isla, ya  que el tiempo se nos acaba y la isla dispone de muy pocos lugares para atracar o fondear. 
El tiempo estuvo duro, con cambios constantes en la intensidad y la dirección del viento (sobre todo al pasar a sotavento de montañas altas), con una punta de 37 nudos y chubascos frecuentes. A pesar de que se produjo un desgarro en la trinqueta (que vamos a reparar en Antigua), tanto el Jafam como la tripulación superamos todas las dificultades. Quien diga que navegar por los mares del Caribe es todo placer, miente; al menos estos nos dice nuestra experiencia, corta pero intensa. Al final fondeamos en la marina a las tres de la mañana.
Hoy viernes hemos recorrido 21 millas a sotavento de la costa de la Basse Terre, una de las dos islas que conforman Guadalupe. El mar ha estado muy tranquilo, el viento suave (que nos ha obligado a ir a motor) y nuestro destino ha sido el fondeo en Deshaies, un encantador pueblo pesquero al norte de Guadalupe.

jueves, 22 de mayo de 2014

VIAJE HASTA SAINT PIERRE


El miércoles día 21 levamos ancla y nos dirigimos a Saint Pierre, resiguiendo la costa de sotavento de Martinica, en total unas 30 millas. Saint Pierre, al pie del Mont Pelée, fue la antigua capital de Martinica hasta que una tremenda erupción en 1902 destruyó por completo la ciudad. Ya visitamos la zona por carretera en nuestra primera parte del viaje pero la perspectiva marina es completamente distinta. Fondeamos en la tranquila bahía y tuvimos la suerte de presenciar un meeting caribeño de las elecciones europeas (sorprendente al menos) y visitar una feria de productos artesanales locales, relacionada con la época de la esclavitud, ya que el jueves era festivo.

martes, 20 de mayo de 2014

LIMPIEZA DE FONDOS

El martes 20 de mayo, a las ocho de la mañana abandonamos el puerto de Le Marin. En seguida nos dimos cuenta que el Jafam tenía problemas de navegación a causa del “fouling” acumulado después de más de dos meses de permanecer fondeado en aguas caribeñas. Nos dirigimos hacia el fondeadero de Sainte Anna, a tan sólo 3 millas de nuestro punto de partida, donde Alfredo con gran esfuerzo y pericia, a base de inmersiones a pulmón libre, fue limpiando todo el casco. La operación nos llevó todo el día.

lunes, 19 de mayo de 2014

FOTO DE DESPEDIDA DE MARTINICA

Completadas las últimas operaciones pendientes y con el Jafam perfectamente a punto, tenemos previsto salir mañana dia 20 al amanecer para recorrer la isla de Martinica por sotavento. Colgamos en el blog la fotografía que inmortaliza este momento histórico.

A PUNTO DE ABANDONAR MARTINICA

El viernes 16 volamos de Barcelona  a Martinica (vía París) para empezar el tornaviaje. En París nos encontramos con Alfredo (nuevo aventurero) y en los próximos días se añadirá Quim, el cuarto tripulante, en un punto aún por concretar. Más emoción, imposible. 
Sólo llegar a Le Marin subimos al Jafam, que ha resistido magníficamente nuestra ausencia, sólo con algunos problemas de batería. Lo trasladamos a puerto y empezamos las labores de acondicionamiento (nueva radio, nuevo segundo piloto automático de fortuna, nuevo equipo para mandar mensajes de posición, invento de protección frente a chubascos, etc)  y avituallamiento (para los primeros diez días), que ya tenemos casi acabadas. Mañana lunes nos queda resolver alguna pequeña cuestión y la intención es salir ya rumbo hacia el norte, navegando a sotavento de  las Leeward Islands hasta llegar a Antigua. En Antigua está prevista una revisión del casco, cargar gasoil y agua además de alimentos para arrumbar hacia Azores, en el tramo más incierto de la aventura. 
Tenemos buenas vibraciones y ganas de continuar la aventura con los nuevos compañeros de viaje… Seguiremos informado en este blog, siempre que dispongamos de conexión wifi…

sábado, 10 de mayo de 2014

PREPARADOS PARA EL TORNAVIAJE


El viernes 16 estaremos en Martinique, llegaremos a las 14:50 hora local a Fort de France habiendo salido a las 7:00 de Barcelona, con las cuatro horas de diferencia más las dos horas de adelanto horario respecto a TUC, significa que entre aeropuertos y vuelos ocuparemos unas 16 horas para re-encontrarnos con el Jafam.
El tornaviaje nos lo planteamos con algunos cambios, el primero el de la tripulación, Terenci por motivos personales no puede venir, pero se han incorporado Alfredo (una persona experta en navegación y profesional de las comunicaciones) y Quim (con amplia experiencia en vela y deseoso de cruzar el charco). A ambos les  damos la bienvenida a bordo y deseamos que compartan con nosotros el mejor de los viajes y una cordial convivencia.

Una vez que estemos a bordo del Jafam tenemos que avituallarlo para el viaje y también hacer algunos trabajos para mejorar las condiciones y la seguridad de la navegación, como el cambio de los tensores de los obenques bajos y el soporte del DuoGen: lo más importante es la incorporación de una nueva emisora de radio con mayor potencia ya que al final del viaje tuvimos algunos problemas de comunicación  con Rafael del Castillo y eso ha sido decisivo para sustituir la emisora.

IMG_20140508_205059[1]También nos falló el teléfono satelital Iridiúm. Dos días antes de llegar a destino dejó de recibir y emitir señales, y no ha sido posible repararlo, mejor dicho, su reparación costaba tanto como uno nuevo. Después de valorarlo hemos decidido sustituir el teléfono  por un localizador DeLorme, que permite dar el posicionamiento en intervalos definidos de tiempo y que aparecerá con un icono en el mapa del Blog diariamente haciendo el seguimiento de nuestra derrota, puede enviar y recibir mensajes cortos (160 caracteres) y en caso de emergencia lanza una señal de S.O.S. –que esperamos no tener que utilizar- y se pone en contacto con los servicios de salvamento marítimo y con Rafael del Castillo
En unos tres días pensamos que estaremos listos para iniciar la subida, visitando Dominica, Marie-Galante, Guadalupe, Montserrat, Antigua, Barbuda… y no nos dará más tiempo y entonces saldremos a la mar océana con rumbo a las Azores.

Invitamos a nuestros amigos y seguidores que nos sigan acompañando a través de este blog, que de nuevo se pone activo.



domingo, 9 de marzo de 2014

EL RETORNO A CASA: SIN NOVEDAD Y CONTENTOS!


Acabada la tercera fase de la aventura en Martinica y teniendo en cuenta que el momento adecuado para el regreso del JAFAM no será hasta finales de mayo-principios de junio, hemos decidido hacer un descanso en nuestra aventura. Después de analizar mucho las distintas opciones disponibles y escuchar las opiniones de otros navegantes, hemos optado por dejar el JAFAM en Martinica (bien cuidado por Benoit y Miguel). Nuestros últimos días has sido de limpieza, acondicionamiento y recogimiento de equipos pero finalmente, y después de una cena de celebración en el ZANZIBAR, el sábado embarcamos en el vuelo a París y desde allí, sin salir del aeropuerto, ya estamos en casa.


Tiempo habrá para valorar estas primeras fases de la aventura. De momento basta con decir que ha sido emocionante, que hemos podido visitar lugares maravillosos, que el JAFAM se ha portado admirablemente y que bajo la diestra dirección de Almirante, hemos sido un equipo eficaz y sin problemas.
Terraza del Zamzibar

Vista del transporte hasta Paris 

lunes, 3 de marzo de 2014

RETORNO A MARTINICA: FINAL DE LA TERCERA FASE DE LA AVENTURA


El domingo 2 de marzo retornamos a Le Marin (Martinica), al mes exacto de nuestra primera llegada después de cruzar el Atlántico desde Las Palmas (segunda fase; la primera fue el traslado desde Badalona a Las Palmas). En estos días hemos hecho un total de 314 millas recorriendo les Windward Islands: Martinica, Sta. Lucia, St. Vincent, Bequia, Canouan, Mayreau y Tobago Cays. Hemos cruzado todos los canales entre islas, casi siempre con navegación muy difícil: una compleja combinación de viento (con sus correspondientes roles cerca de las islas), oleaje y corrientes. Hemos visitado lugares que jamás se nos borrarán de la memoria, disfrutando de la gastronomía local (y también de la nuestra propia), nos han tomado el pelo en más de una ocasión y hemos conocido personas admirables, cada una de ellas con su propia aventura a cuestas… Podríamos utilizar muchos adjetivos si hiciéramos un  balance de lo vivido hasta hoy pero en ningún caso la decepción.

Ahora toca descansar un poco, ordenar el barco y tomar decisiones acerca de cómo sigue la aventura. Informaremos puntualmente a nuestros seguidores…

miércoles, 26 de febrero de 2014

ESCALA EN BLUE LAGOON


La mañana del día 25, a primera hora, hemos zarpado de Port Elizabeth, con una cierta nostalgia de que abandonamos definitivamente Bequia, nuestro destino en esta aventura. Hemos decidido hacer escala en Blue Lagoon, una maravillosa cala situada al sur de St. Vincent, cerca de la capital Kingstown (que ha sido aprovechado para hacer los trámites de salida de aduanas e inmigración del país), rodeada de arrecifes y de entrada angosta. Como siempre, una parte del viaje ha sido dura: ciñendo y con un fuerte oleaje en contra. La navegación entre islas en el Caribe es muy complicada; pero como todo en la vida, nos acabamos acostumbrando. Aunque las fotografías que os adjuntamos difícilmente hacen justicia a la belleza del lugar, esperamos que os gusten.






domingo, 23 de febrero de 2014

BEQUIA

13° 00.4901' -61° 14.2384'
Despues de una complicada remontada estamos nuevamente en Bequia

COMIENZA EL RETORNO ...


En la isla de Mayreau, en Tobago Cays, hemos alcanzado nuestro punto más al sur: 12º 36,1’N de nuestra aventura. A partir de aquí empieza el retorno…

EL MISTERIO DE CANOUAN: LA "DINGUI" PERDIDA Y HALLADA



Para aquellos lectores no avezados en la jerga marinera, primero explicaremos que la “dingui” no es otra cosa que una barca auxiliar hinchable, de unos 3-4 metros, complemento indispensable de un velero para poder ir a tierra cuando se está fondeado.

Pues bien, esta mañana en Canouan nos hemos dado cuenta que nuestra “dingui” (con sus remos, su motor y su depósito de gasolina) había desaparecido. Una mala noticia y que nos afectaba para el resto del viaje. Por la noche había hecho mucho viento y aunque había una remota probabilidad de que se desenganchara (los nudos del Almirante son siempre seguros) lo más probable es que nos la hubieran robado. Más allá del valor material (importante) era cómo resolvíamos bajar a tierra. Convencidos que no había solución, decidimos levar ancla…

Aquel mismo momento nos persigue un local (Markus, al que habíamos encargado pan y fruta) y al alcanzarnos nos dice que nuestra “dingui” se había soltado con el viento, que la habían localizado muy lejos y que la había recuperado para devolvérnosla. Era evidente que el servicio tenía un coste, que ha sido de 200 dólares USA. Pagado el rescate, hemos recuperado nuestra “dingui” y podemos seguir (relativamente contentos) la aventura con normalidad.

Dudas que nos asaltan: ¿Se soltó realmente con el viento?. Imposible. ¿Se la llevaron para pedirnos un rescate en lugar de simplemente robarla? ¿Ha sido una operación con cómplices?. Ya nunca lo sabremos…. Será el “misterio de Canouan”. La “dingui” perdida y hallada; como Jesús en el templo…


BEQUIA


Hicimos una visita rápida a Bequia: es una isla muy hermosa, bien cuidada y limpia. En la zona norte existe una reserva para la puesta de las tortugas marinas y playas que concuerdan con nuestra imagen previa del Caribe. Adjuntamos algunas fotografías que hicimos antes de partir para Canouan y Tobago Cays, con la voluntad de volver a visitar Bequia al regreso.





jueves, 20 de febrero de 2014

BEQUIA (PORT ELIZABETH): HEMOS ALCANZADO NUESTRO OBJETIVO!


Finalmente, el martes día 18 de febrero de 2014 hemos llegado a Bequia, nuestro destino, después de recorrer 2957 millas en 36 días (incluidas las escalas) desde la salida de Las Palmas. Para cubrir el último tramo partimos muy temprano de Wallilabou a fin de evitar cruzar el canal entre St. Vincent y Bequia al mediodía; aún así, la fuerte corriente y el role constante de los vientos (que alcanzaron en momentos 25 nudos) producidos por el efecto entre las islas y las altas montañas nos dieron un par de horas de guerra. Alcanzar la bahía de Port Elizabeth (llena de veleros de todas nacionalidades)  y fondear en una boya nos devolvió la tranquilidad y nos hizo ser conscientes de que habíamos alcanzado nuestro objetivo. Para celebrarlo compramos un par de magníficas langostas que nos fueron ofrecidas por un vendedor en barca.


Después de la foto protocolaria, recorrimos el frente costero, con todo tipo de bares y restaurants,  que tiene un alto nivel de vida y es muy distinto de lo que hemos visto en St. Lucia y St. Vincent. La gente es amable y no ejercen una presión brutal para la venta de sus servicios. Por la noche hicimos la cena de celebración en el Gingerbread Hotel y nos hemos regalado el miércoles de descanso (ha sido un día gris, con lluvia y mucho viento), que hemos aprovechado para cocinar una magnífica caldereta de langosta con vino de Rueda. Os incluimos un reportaje del proceso de elaboración y manifestamos solemnemente que la historia de que las langostas del Caribe no son sabrosas es una leyenda náutico-urbana; al menos las nuestras han estado deliciosas…!






martes, 18 de febrero de 2014

EN EL ESCENARIO DE "PIRATAS DEL CARIBE"


El domingo día 16 reanudamos el viaje. El cruce desde Pitons a la isla de St. Vincent (canal de St. Vincent) fue bastante duro, con una mar de hasta 3,5 metros de altura y vientos racheados que alcanzaron en algún momento los 30 nudos, afectado por los chubascos y el efecto de las montañas en la punta de la isla. Después de sopesar varias opciones, nos inclinamos finalmente por echar el ancla en la bahía de Wallilabou, escenario del rodaje de varias películas de “Piratas en el Caribe”, habiendo empleado unas 7,5 horas para recorrer 39 millas.

Aparte de una caminata de 1,5 horas, subiendo y bajando montañas, para completar los trámites de aduana y policía, nuestra decisión fue un acierto. La bahía es espectacular, sus gentes son amables (aunque siempre buscan cobrar el servicio) y además de visitar los restos de los escenarios de la película,  cenamos una extraordinaria langosta (¿quién dice que el marisco del Caribe no es sabroso?) en el Wallilabou Anchorage Restaurant.


Tanto nos ha gustado el lugar que hemos decidido quedarnos hoy todo el día, primero para hacer algunas pequeñas puestas a punto del barco y después para tomar un baño en la cala situada un poco más al sur, comer de nuevo en el Anchorage (comida criolla) y finalmente una merecida siesta. Mañana finalmente salimos para Bequia, destino de nuestra aventura!